Encontrábase un hermano
con cara muy pensativa,
la vida analizaba,
una duda, él tenía
¿qué somos en el conjunto
y quien nuestra vida guía?
Del silencio la respuesta
llegaba clara y sencilla,
eres cuerpo, eres alma,
es el Padre quien nos guía.
Otras ideas surgieron
sonando como un susurro,
cuida el cuerpo día a día,
del alma, cada segundo,
la materia es pasajera
el alma tiene futuro.
Al cuerpo no envicies
ni acostumbres al exceso,
es la mejor herramienta
que nos lleva hacia el progreso
nos la prestó por un tiempo
nuestro amado Creador,
esperando que nosotros
hagamos el uso mejor.
El alma, cuando se extasia
en plegaria de amor plena,
siente la gran dulzura
que del Padre siempre llega,
y una voz acariciante
invitando a la conciencia
a cumplir solo las leyes
que hacia la verdad, la llevan.
Que alegría siente el alma
cuando descubre sincera
que ha progresado en la vida
que hizo una buena siembra.
Son alegrías sin nombre
en las lenguas de la tierra,
son luces de mil colores
de una armonía serena,
que hablan de la grandeza
de las leyes que gobiernan
la vida en todos los mundos
que del alma, son escuelas.
POESÍA MEDIÚMNICA (C.E.Y.D.E.)
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